Abueletes (6) Triaje


La orden era tajante: colapsadas por la pandemia las UCIs de todos los hospitales, las autoridades decidieron que había que proceder a hacer un triaje. 

―¿Triaje? ¿Y eso qué é lo que é?― preguntó el abuelillo. 
―Yo se lo explico, mire: un triaje es cuando, entre intentar salvar a un enfermo muy grave joven o a un enfermo muy grave viejo, escogen al joven― contestó alguien que estaba detrás de él en la cola del Mercadona. 

El abuelete se quedó pensativo… y preguntó al cabo de un rato: 

―¿Y… qué hacen con el vejete? 
―Pues… si está muy malito, muy malito, lo dejan morirse en su casa, o en la residencia, es ley de vida. 
―(Será ley de muerte…)― susurró bajito el abuelete mientras pagaba la barra de pan sin sal. 

Caminando hacia su casa con la gayá en una mano y la bolsica del pan en la otra, pasico a pasico, pensaba el abuelo: “He vivido mucho y bien, tengo muchas experiencias, no me puedo quejar… Cuando llegue el momento podría entender que tengo que ceder la prioridad de la salvación a alguien con más futuro que yo… Pero, ¡pijo!, al menos que no me dejen abandonado, que me den una alternativa, una compensación, una satisfacción póstuma. Poco pido: una botella de Jumilla… o un plato de michirones… o una postrera partida de bresca con mis amigos… o que me dejen intentar echar un último polvo…” 

Con estas reflexiones, esquivando en la acera los cagarrios de perros y torcaces, llegó el abuelillo a su casa. Y allí sigue de momento, rodeado de recuerdos, ideas, proyectos. Feliz a su modo.

Comentarios

  1. Hola hola!
    Han vuelto los abueletes!!
    Es una muy buena noticia que, el que asoma hoy, siga allí esperando cumplir sus proyectos.
    Seguramente ese abuelete, que tiene años vividos, sabe que "siempre que llovió, paró" y está esperando que escampe el diluvio que nos sorprendió a todos y todas en el mundo entero.
    Abrazo amigo Diego, desde el otro lado del mapa esperando también que escampe.

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  2. Yo por si acaso, esta semana me hago unas migas, con "mesao", chorizo y" ugüas", vino de Valdepeñas, por lo que pueda pasar.
    Lo del "polvo", prefiero no morir en el intento.
    Nos lo tomamos a cachondeo, pero es una triste realidad.
    Un abrazo.

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  3. Ana María10/25/2020

    Por fin sacaste a los abueletes de ese encierro; déjalos en sus casas que por Sevilla están confiando a los que están en las residencias tal y como hay un positivo, aunque sea de sus sobrinos que los saludan por las ventanas a 10 metro :/
    Yo en tal caso lo de comer algo rico no sé, pero que me dejen echar un polvo sí, y si tuviese 70-80 años pues si no es mucho pedir que mi compañero ese rato sea más joven, vaya a ser que no le funcione la cosa y nos quedemos a medias :D
    Un abrazo, Diego :)
    Saludos a los demás :)

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  4. Sí, Lu, volvieron los abueletes, señal d que siguen vivos... A ver si superan esta segunda ola, y una tercera, y una cuarta... A ver si escampa pronto también en tu sur del sur. Beso.

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  5. Amigo Juan, si no te importa, me apunto a esas migas para tomármelas contigo antes de entonar el que me mú, que me mú... Yo llevo de postre un pastelico de la cierva y para cenar unos fideos con pelotas, no sea que no llegue mi mañana, o que llegue malamente. En cuanto al polvete, yo pienso intentarlo aunque muera en el intento. Y quizás contrate a un grupo de "palmeros" para que me den ánimos mientras me esfuerzo en la coyunda. "¡Mira qué cara de felicidad se le ha quedao!" dirían mis deudos en mi funeral :D
    Sí, realmente es mejor tomárselo a cachondeo.
    Abrazo fuerte.
    Un abrazo fuerte.

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  6. Ana, ¿dejar a mis abueletes en sus casas? Ni de coña, son libres (sin entrar en detalles...)
    En cuanto al otro asunto, propongo que se cree una ONG para asistir en sus últimos deseos a ancianos y ancianas sometidos a triaje. Ahí dejo la idea...
    Y me voy a pasear.

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    Respuestas
    1. Ana María10/28/2020

      Quizás me expliqué mal; en sus casas pero haciendo lo que quieran :)
      Secundo esa idea de la ONG, que yo también seré una anciana dentro de muchos muchos años :)

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  7. Y es que tus abueletes, Diego, son muy sabios, resistentes y apañadicos. Y siempre me sacan una sonrisa.

    Yo estoy con el abuelo, que si no hay más remedio con lo del triaje que al menos el Gobierno les de una compensación. Vamos que a cambio de morirse sin molestar les concedan tres deseos como mínimo, como Haría cualquier mago que se precie al que sacas de un atolladero.

    Todavía no me siento abueleta, Diego, pero cada vez me acerco más, y ya siento eso de "hacerme mayor sin delicadeza", pero el pan sin sal, ni hablar. Y con un chorrito de aceite de oliva virgen.

    Un abrazo

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  8. Ah, que siempre me olvido algo, Diego, ¿será la edad?
    Me he reido un montón con tus respuestas, sobre todo con la que le das a Juan.

    Besicos,

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  9. Qué alegría tu vuelta Diego. Se necesita ese buen humor tuyo en estos tiempos extraños. Pobres abueletes que están pagando el pato de manera tremenda. Apuesto con ellos a que tengan una compensación. Tengan, o tengamos...yo soy una abueleta también. Me has hecho reír un buen rato querido amigo. Mil gracias.

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  10. Muy triste que el bicho se llevara a tantos Abueletes con o sin triaje. Esperemos poder seguir pasando del bicho aunque lo tenemos muy cerca, ya que somos abueletes, sin nietos, pero lo somos Diego.
    Y a este paso a esta pobre 🛵 se le oxidará todito... y lo que le queda , que también añora volver a la Covatilla .
    Mejor conformarse poque al menos de momento podemos seguir saliendo a patear, que puede que en ná , ni eso .
    Buena noche. Y cuídate.
    Un abrazo.

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