Instrucciones para abrazar

Me ocurrió hace unos días. Me encontré en la calle con una amiga muy querida, a quien el confinamiento covidiano me ha impedido ver durante casi dos años. Nos reconocimos en la distancia y, gritando nuestros nombres, nos abalanzamos el uno hacia el otro, dispuestos a darnos un abrazo. Un deseo legítimo, reprimido después de tantos meses de restricciones (no os toquéis, no os tosáis, no besaros, usad la mascarilla, no concupiscir…). Fallamos. Tanto tiempo sin tocamientos, tanta prohibición hicieron que fracasáramos en nuestro intento abracil. No recordábamos dónde, cómo colocar los brazos, la cabeza, cuál era la aproximación adecuada, las distancias, los ángulos, las perspectivas. Tras un breve y absurdo aleteo con los brazos, sin saber cómo engancharnos, nos despedimos ejecutando esa cosa absurda de juntar los codos, quizás el saludo más idiota y antiamistoso que se ha inventado. 

Al volver a casa triste, frustrado y abatido, busqué en mis estantes las “Instrucciones generales para abrazarse correctamente”. Encontré. Desempolvé. Leí. 

Entresaco los párrafos principales: 

“La posición de los brazos es muy importante. Al aproximarse el abrazador —en adelante A— a la persona que pretende abrazar —en adelante B—, A deberá extender los brazos hacia el frente, de manera que el izquierdo quede en una posición más baja que el derecho (entre 20 y 30 cms contados en proyección vertical). Eso permite que el enganche de A con B sea perfecto al pasar A el brazo izquierdo por el costado derecho de B mientras el derecho rodea su cuello. 

La inclinación de las cabezas debe ser suficiente como para que no se produzca un topetazo entre A y B. Se estima que con un ángulo de 30º a la izquierda es suficiente para evitar el entrechocamiento y para que las respectivas cabezas queden algo separadas (no es estético que se junten las mejillas) 

La distancia entre las manos de A (abiertas, con los dedos separados, nunca cerradas en forma de puño) tendrá que ser suficiente como para que quepa entre ellas con cierta holgura el torso de B (unos 50 cms). Por otra parte, la aproximación de los cuerpos durante la fase culmen del abrazo deberá ser tal que quede siempre un espacio de unos 5 cms entre barriga y barriga. Si la distancia interbarriguera es menor, el abrazo se podría considerar indecoroso. 

El eje del cuerpo de A (y el de B, por extensión) debe estar en posición vertical en relación con el plano del suelo. Una excesiva inclinación hacia delante podría reflejar sumisión y si es hacia atrás, rechazo (también conocido como hacer la cobra). 

Los frotamientos arriba y abajo de las manos de A en la espalda de B, tras el enganche, deben ser acompasados, firmes y sin una presión excesiva, no debiendo superar nunca el número de 5 haciarribas y 4 haciabajos. Exceder estas cifras se podría considerar como amistad sospechosa.” 

Así que ya sabes, Sara, memorizaré estas instrucciones y la próxima vez que te encuentre te voy a pegar un achuchón que van a crujir las estrellas. Y los planetas.

Comentarios

  1. Toda una lección, tomo nota.
    Me ha impresionado la precisión: "no debiendo superar nunca el número de 5 haciarribas y 4 haciabajos."
    Saludos.

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    1. Hola, Enrique. La verdad es que yo esa norma siempre me la salto. Prefiero la combinación de 6 haciarribas y 3 haciabajos.
      Un saludo.

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    2. Bien, gracias por la aclaración, me quedo más tranquilo.

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  2. Copio y pego, que uno anda bastante falto de achuchones. Se te echaba de menos y tu vuelta nos trae de nuevo esa sonrisa de la que estamos tan necesitados.
    Un abrazo, como caiga.

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    1. Juan, andaba "escondío", como una larva de cigarra. Espero seguir un tiempecito por aquí.
      Contigo los abrazos no necesitan normativas, siempre caen en su sitio.
      Ahí va uno.

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  3. Jajaja, todo un tratado sobre los abrazos, Diego.
    Estamos ya hartos de tanta parafernalia y restricciones a la hora de demostrar el afecto.
    Genial tu aportación para cuando volvamos a ser libres de abrazar.
    Un abrazo querido amigo.

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    1. Maripaz, hace un año por estas fechas ya decíamos que no podía durar mucho más esta situación. Y aquí seguimos. Espero que dentro de un año no tengamos que seguir diciéndolo...
      Abrazote, Maripaz.

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  4. Hola Diego!
    Qué lindo que hayas regresado. Siempre logras sacarme unas cuantas sonrisas y esto para mi está muy bien. particularmente en estos días.
    Genial el "tutorial " para abrazar. jajaja
    La verdad es que si bien no ando repartiendo abrazos "a troche y moche", ya he estado abrazándome con algunas personas muy queridas por mi.
    Por ejemplo cuando fui, en agosto, a visitar parientes.
    O durante estas últimas dos semanas a partir de la muerte de mi gatito.
    Y recuerdo aun como sentí el primero luego de un año y medio sin abrazos.
    Y si de abrazos hablamos, va uno hasta tu tierra de mi parte.

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    1. Me alegran tus sonrisas, Lu. Y tus abrazos. Yo también hace tiempo que decidí abrazar, un mundo sin abrazos es como un niño sin sonrisa. Recibí tu abrazo directamente, trasportado por las corrientes de vientos del sur. Te envío el mío para allá, aun que tarde un poco más en llegarte por el sentido del giro del eje de la Tierra :D

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  5. Un abrazo Diwgo, encantada de volver a leerte después de tanto tiempo

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    1. Otro para ti, Marijose. A ver si puedo leerte yo a ti de nuevo :)

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  6. Ana María10/06/2021

    Me han encantado las instrucciones para abrazar de tu libro :)

    Yo de hace tiempo voy repartiendo besos y abrazos, que estoy un poco harta de tanta distancia.

    Un abrazo para ti de esos indecorosos y sospechosos :D

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    1. Ana, a ver si podemos poner en práctica los dos estas instrucciones., frente a frente. Sería un placer :) Un abrazo sin r4estricciones.

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