Otros gritos en otros lugares: gorila africano oso polar rinoceronte blanco tigre de Amoy ajolote lémur mariposa monarca buitre lince ibérico ....... mejor no sigo, verdad?...
Pero es obvio que estos temas les importan una higa a nuestros ilustres líderes políticos. En el aburridísimo debate de la otra noche creo que solo dos de ellos mencionaron la expresión "medio ambiente", pero como deprisa, sin mirar, no fuese que alguien pidiera algún tipo de medida. A pesar de las manifestaciones (¿sirven para algo?) que están teniendo lugar allí, el Mar Menor se muere sin que nadie haga nada.
¿Políticos hablando de Medio Ambiente o problemas urgentes que nos afectan a los que les pagamos el sueldo y soportamos su insulsas declaraciones y peleitas de atril?
Eso es más raro que ver llorar a un pez por los miles de colegas que se han muerto o han decidido borrar el Mar Menor de su ruta.
Me encanta tu viñeta.
El mar, el origen de la humanidad se muere, una señal de que la humanidad no tiene remedio, cuando parece que está a punto de despegar para avanzar gira sobre sí misma y se encamina de nuevo a las cavernas.
Diego, te he contestado en mi blog, verás qué pequeño es el mundo.
Ohhhh Diego! Realistamente triste tu imagen de hoy. Lo has plasmado muy bien. He visto una foto de los peces muertos en un periódico de tu país. ¿Como es posible que nadie, pero nadie, intente resolver el problema? En todo el mundo el desastre ambiental parece no ser comprendido. Excepto por algunos pocos movimientos de ONG
Y, vamos, que los que tienen el poder de decisión para hacerlo no toman cartas en el asunto, pero... ¡Hagámonos cargos todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas del mundo también! ¿Cuál es nuestra contribución, aunque sea mínima, para evitar tales desastres? Un abrazo desde el sur del sur
De pena. Como sigamos así, no quedarán peces ni en las peceras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí... Da pena...
ResponderEliminarNadie lo oye pero estoy segura que pregunta ¡¡¡¿Porqué?!!!
:(((((
Lo has ilustrado muy bien, Diego con ese dibujo.
ResponderEliminarUna pena tremenda.
Saludos
Otros gritos en otros lugares:
ResponderEliminargorila africano
oso polar
rinoceronte blanco
tigre de Amoy
ajolote
lémur
mariposa monarca
buitre
lince ibérico
....... mejor no sigo, verdad?...
Pero es obvio que estos temas les importan una higa a nuestros ilustres líderes políticos. En el aburridísimo debate de la otra noche creo que solo dos de ellos mencionaron la expresión "medio ambiente", pero como deprisa, sin mirar, no fuese que alguien pidiera algún tipo de medida. A pesar de las manifestaciones (¿sirven para algo?) que están teniendo lugar allí, el Mar Menor se muere sin que nadie haga nada.
ResponderEliminarSí, gata, son gritos al vacío...
¿Políticos hablando de Medio Ambiente o problemas urgentes que nos afectan a los que les pagamos el sueldo y soportamos su insulsas declaraciones y peleitas de atril?
ResponderEliminarEso es más raro que ver llorar a un pez por los miles de colegas que se han muerto o han decidido borrar el Mar Menor de su ruta.
Me encanta tu viñeta.
El mar, el origen de la humanidad se muere, una señal de que la humanidad no tiene remedio, cuando parece que está a punto de despegar para avanzar gira sobre sí misma y se encamina de nuevo a las cavernas.
Diego, te he contestado en mi blog, verás qué pequeño es el mundo.
Un abrazo,
Siempre quedarán las hormigas, Tesa :)
ResponderEliminarMe voy pa'l almacén.
¿Sabias que las hormigas no duermen?, yo duermo poco, pero ellas nada, qué horror, aunque a lo mejor sueñan despiertas.
ResponderEliminarEn el Almacén está mi email, Diego, no tengo wasap, así que soy de las que miro el correo.
Un beso,
Ohhhh Diego!
ResponderEliminarRealistamente triste tu imagen de hoy.
Lo has plasmado muy bien.
He visto una foto de los peces muertos en un periódico de tu país.
¿Como es posible que nadie, pero nadie, intente resolver el problema?
En todo el mundo el desastre ambiental parece no ser comprendido.
Excepto por algunos pocos movimientos de ONG
Y, vamos, que los que tienen el poder de decisión para hacerlo no toman cartas en el asunto, pero...
¡Hagámonos cargos todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas del mundo también!
¿Cuál es nuestra contribución, aunque sea mínima, para evitar tales desastres?
Un abrazo desde el sur del sur