Sabores
Tomar de ti un puñao
en mi mano errante;
besarte, morderte.
Sabes a humo de rama
quemada, a rastrojo;
a albercoquero, a noguera;
a tahúlla majencada,
a agüica rulando en la cieca
camino del cornejal;
a olivera esgajá de tan vieja,
a atocha; a juan.
También me sabes a cal
de roca blanca;
a juma, a torvisco,
a nube gris desgarrada
y a polen, libre, de pino.
Y una noche sabrás, lo sé,
siquiá un poquico,
una miajica, a mí.
(Foto: Floración de albaricoqueros en un rincón de la sierra caravaqueña)
¡Que bella foto Diego!
ResponderEliminarDescriptivo poema, poético, sentimental...
Esperemos que falten muchasssssss noches para que te mezcles con sus sabores.
Abrazo va cruzando los mares y las tierras perfumadas
Lu, la foto no es de este año, sino de un año pasado en que la floración de los duraznos fue espectacular y la cosecha también. Este año, a causa del exceso de agua y de las heladas posteriores no creo que la cosecha me de ni para un tarro de mermelada :)
EliminarYo también espero que pasen muuuuchas noches :)
Abrazo de largos brazos y grandes manos, Lu.
Hola, Diego
ResponderEliminarLa imagen muestra árboles floridos cuyas flores se convertirán en deliciosas y agradables frutas; hermoso proceso; me encanta. Interesante tu descripción poética.
He leído tu publicación anterior, el vaso, el agua, levantada nocturna. Mi esposo bebe dos vasos de agua antes de ir al lecho, luego, es tan “mono!” que se levanta un par de veces. Bebo agua durante el día, no en la noche; pero siempre dejo en la mesa un frasco de cristal con agua para beber cuando comience el día.
Cordiales saludos
Hola, Rud!
EliminarComo le comento a Lu, este año no habrá cosecha. Esa zona es así: unos años por una causa y otros por otra es frecuente que nos quedemos sin probar su fruta. Eso sí, cuando hay fruta, es excelente :)
Con relación al problema del agua nocturna yo he tomado una decisión: en mi mesilla coloco un botijo y doy un chupito cada vez que me despierto. Y si hace calor, me doy una ducha para refrescarme :)
Un saludo afectuoso.
Inmensa. Esos sabores que en poco estarás besando y mordiendo con gran placer Diego...ellos te esperan. Así se pone el Valle del Jerte con los cerezos.
ResponderEliminarBuen lunes.
Un abrazo.
Hola, Laura. Creo que todos deberíamos pegarle "bocaos" a nuestra tierra de vez en cuando :)
EliminarNo es el Valle del Jerte... pero a veces se le parece por la belleza de la floración.
Un abracete.
Que delicia de fotos y de poema, Diego, esa tierra que amas y que tiene tanto sentido para ti te inspira para hacer un bello diccionario de términos cantarines, ritmosos, algunos no los conocía, pero todos me huelen a solana, a primavera, a lluvia antes de caer... a fruta madura...
ResponderEliminarA ver si se puede salvar algo de la cosecha, Diego. Y eso... que que tardes mucho en fundirte en este poema de sabores.
Espero que ya lo veas todo con mucha claridad y estés como recién estrenado, Diego. Un abrazo,
Pues no, jamía, la cosecha se fue al garete. Habrá que esperar al año próximo... Cada vez lo veo todo con más claridad... y no sé si me gustaba más el mundo como antes, más borroso :)
EliminarAbracete, Tesa.