"Poderoso caballero es don dinero". Todos tenemos un precio (el mío es barato, pero aún se me ha acercado nadie a hacerme proposiciones deshonestas :D)
Tienes razón, Beauséant, a los corruptos siempre los sigue una cohorte de aduladores, votadores y jaleadores dispuestos a perdonarles todo. Los malos son siempre los otros.
Los prefijos ( no sólo los sufijos) también tienen su aquel, eh? Sonrío. No sé por qué siempre recuerdo el brazo de Sta Teresa y su dedo meñique... ¡¡qué cosas!! ¿de ahí los dedos de Santo? y de los corruptos el chorizo? Ya me has hecho pensar... aynss. Abrazote, diego.
"Yo quiero ser incorrupto". Podría ser el título de una canción de alguno de los horribles grupos de la movida madrileña :) Otro abrazote para ti, Zarza guapa.
Iota. Ay ! querido Diego , cuando he visto al exotico monje de algun monasterio oriental yacer incorrupto con su cara de alienigeno mala uva , he sentido que se me encogia el corazon . Al poco mi vista a caido sobre el corrupto , tan humano , tan vivillo , soltando billetes del Banco de España recien acuñados .. mi corazon ha saltado de alegria. Coña.!! al fin una cara conocida !! . Bess
Hola Iota. La verdad es que los incorruptos (o sus miembros) dan un poco de yuyu y asquito... Yo prefiero que me quemen, no sea que a última hora me convierta en santo e incorrupto :) Un beso, Iota.
... y afortunadamente, luego estamos los demás.
ResponderEliminarYo, por si las moscas, ya he dicho que me incineren :)
EliminarUn abrazo, Juan.
Jajajajaja, muy bueno, diego.
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, Cabro, la risa es muy sana :)
EliminarPues he oído que con dinero te dan bulas y se te perdonan pecados. Depende de a cómo esté el precio de robar ya sale a cuenta lo de ser corruptus.
ResponderEliminar"Poderoso caballero es don dinero". Todos tenemos un precio (el mío es barato, pero aún se me ha acercado nadie a hacerme proposiciones deshonestas :D)
EliminarAl corpues corruptus le faltaría, por completar el espectáculo patrio, un montón de idiotas jalenado (y votando) al ladrón ;)
ResponderEliminarTienes razón, Beauséant, a los corruptos siempre los sigue una cohorte de aduladores, votadores y jaleadores dispuestos a perdonarles todo. Los malos son siempre los otros.
EliminarMás grafico e ingenioso, imposible.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Diego.
Otro para ti, Enrique
Eliminar(no sé por qué tus comentario no aparecen directamente aquí, tengo que copiarlos del correo electrónico)
A buen entendedor...¡muy gráfico y preciso! Me encantó. "Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia" :):)
ResponderEliminarAbrazo va
Otro abrazazo rumbo a Ushuaia, Lu :)
EliminarLos prefijos ( no sólo los sufijos) también tienen su aquel, eh?
ResponderEliminarSonrío.
No sé por qué siempre recuerdo el brazo de Sta Teresa y su dedo meñique... ¡¡qué cosas!! ¿de ahí los dedos de Santo? y de los corruptos el chorizo?
Ya me has hecho pensar... aynss.
Abrazote, diego.
"Yo quiero ser incorrupto". Podría ser el título de una canción de alguno de los horribles grupos de la movida madrileña :)
EliminarOtro abrazote para ti, Zarza guapa.
Iota.
ResponderEliminarAy ! querido Diego , cuando he visto al exotico monje de algun monasterio oriental yacer incorrupto con su cara de alienigeno mala uva , he sentido que se me encogia el corazon . Al poco mi vista a caido sobre el corrupto , tan humano , tan vivillo , soltando billetes del Banco de España recien acuñados .. mi corazon ha saltado de alegria. Coña.!!
al fin una cara conocida !! . Bess
Hola Iota. La verdad es que los incorruptos (o sus miembros) dan un poco de yuyu y asquito... Yo prefiero que me quemen, no sea que a última hora me convierta en santo e incorrupto :)
EliminarUn beso, Iota.
Please read my post
ResponderEliminarRead mine first, please
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